Luis Hermano fundador de la Hermandad de la Redención, su sueño era volver a ver la salida de las imágenes desde la iglesia que ayudó a levantar hace años, y lo cumplimos juntos.
Desde primera hora el día fue perfecto, con sol, emoción y una familia que nos recibió con los brazos abiertos. Luis estaba feliz, ilusionado, y al llegar a la iglesia no paraba de saludar a amigos que le tienen un cariño inmenso.
Pero el momento más especial fue la salida de las imágenes. Rodeado de su familia, con la banda sonando y su Cofradía en la calle, Luis se emocionó, y nos emocionó a todos.
Al regresar a casa, nos dijo que había sido el momento más feliz de su vida. Y eso es justo lo que da sentido a todo.
Gracias a Luis y a su familia por permitirnos vivir este día con él.